SITGES 2010: «RARE SPORTS: A CHRISTMAS TALE»

La Navidad siempre ha dado mal rollo. No nos referimos solamente a las aglomeraciones en los centros comerciales y la ingesta masiva de polvorones en las reuniones familiares. Se nos ha ocultado algo, han maquillado la verdad y la han enterrado para que la olvidemos. Por suerte, el realizador finlandés Jalmari Helander lleva años dándonos pistas sobre el terrorífico origen de Santa Claus (Rare exports Inc (2003) y The oficial Rare Exports Inc.: Safety Instructions (2005)). Y francamente, a mi me cuadra más su versión que la de la Coca-cola.

Pietari es el niño protagonista de esta fábula de aventuras, que mezcla terror, humor y fantasía formando un equilibrio perfecto que no se veía desde los grandes clásicos de los 80 (Gremlins, Goonies y demás obras maestras). Un día, mientras espía la extraña excavación que está teniendo lugar en la montaña, Pietari descubre un secreto terrible. Santa Claus no es el entrañable viejecito que lleva regalos a los niños, sino un ser demoniaco que se lleva a los niños que no se han portado bien, para castigarles severamente. Y está a punto de ser desenterrado de las profundidades a las que fue enviado por el bien de la humanidad.

Con esta premisa sencilla pero rebosante de originalidad, se desarrolla una especie de “cuenta atrás” para un 25 de Diciembre más amenazante que nunca. Pietari tratará, sin mucho éxito, de convencer a su entorno –especialmente a su escéptico padre- del peligro que se avecina. En general el ritmo de la película tiene algunos altibajos, pero es durante su última media hora cuando ésta se revela como un futuro gran clásico del género de aventuras juvenil, con un ritmo trepidante y “momentazos” que fueron capaces de arrancar más de un aplauso en su primer pase de prensa.

No quiero dar muchos más datos sobre el desarrollo de la trama, ya que se trata de una película que se disfruta más cuanto menos sabes. (De hecho, no recomiendo ver los cortometrajes que dieron germen a la película hasta después del visionado de esta).

Técnicamente es sorprendente, con una ambientación de cuento siniestro muy lograda en algunas escenas y decorados, especialmente hacia la parte final. Tanto la banda sonora como los efectos especiales juegan su papel y configuran una película que, para ser una ópera prima europea, poco tiene que envidiar a las grandes superproducciones hollywoodienses.

Sin duda, una de las propuestas más frescas que ha llegado al programa oficial de Sitges este año, cuya calidad y originalidad espero se vea recompensada con un estreno a nivel internacional. Y es que, señores, ésta “Rare Exports: A Christmas tale” debe ser, por derecho, la película de las navidades.  Y ya veréis como en el 2011 todos los niños se esforzarán por comportarse como pequeños santos.

 

Lo mejor:

-La originalidad de la idea, y su estupenda puesta en escena.

-El casting, destacando especialmente al joven actor Onni Tommila, que da vida a uno de esos personajes infantiles de aventuras a los que enseguida coges cariño y se te quedan grabados en la memoria.

Lo peor:

Que genere falsas expectativas debido a la peculiaridad de su temática y su puesta en escena. No es una película para niños, sino queremos que estos crezcan con un severo trauma, pero tampoco es una película puramente de terror.  Como ya hemos dicho, se aproxima más a películas de género fantástico como las sagas de Gremlins y Critters que tan buenos momentos nos dieron allá por los ochenta.

Nota: 9/10

Merche Moreno Barbero
para
www.cineactual.net